Peces pequeños en la pecera de cristales rotos,
sangre parecida al rojo..
Recibimos las mismas palizas
y sin embargo no nos conocimos.
Vivimos en el mismo barrio,
cerca de los jardines con flores marchitas.
Un día,
nos vimos en la perfumería de las esencias amargas...
Y sin embargo no nos conocimos.
A nuestros libros se la cayeron las páginas,
a mis relojes las agujas..
a tus conversaciones las preguntas.
Escuchamos los jueves las canciones de los domingos..
Y sin embargo no nos conocimos.
Nos empapamos con la misma lluvia,
el mismo viento despeinándonos..
Tal vez descubrimos un nuevo lenguaje.
Y sin embargo no nos conocimos.
La ciudad,
una palabra a dos voces,
una grave y otra aguda.
El quiero y no puedo.
Tu voz y la mía... Podrían ser armonía
y sin embargo no nos conocimos.
Mi cuarto está oscuro
la ducha está helada.
mi sueño dormido.
¿Has venido a ayudarme?.
¿Te quedarás conmigo?
Tal vez hoy sea distinto.
Quizá sólo diferente...
La esperanza es un viajero que vuelve
desde el futuro al presente.
ME ALEGRO DE CONOCERTE!!.
¡¡Vaya, Poesía!!
ResponderEliminarQué sorpresa.
Una sonrisa, por fin, optimista ;)
Que chulada de verso ! me encanta lo que escribes, quiero un autografo !
ResponderEliminarEva!.