lunes, 31 de octubre de 2011

HALLOWEEN...


There's something in the shadows
In the corner of your room
A dark heart is beating and waiting for you
There is no open window but the floors still creep
In the room where you sleep

Oh, you better run..

domingo, 30 de octubre de 2011

kamikaze


Me suicidé un día de otoño,
con la lluvia emborronando el camino de gigantes de cristal.
Yo corría
dejando una estela de zancadas embarradas,
hacia el túnel,
como si la vida me persiguiera de cerca.

Allí dentro,
en aquel lugar bajo tierra
parecido a un refugio antiaéreo
sorteé obstáculos.
Esquivé ancianos,mujeres, niños,
tipos de mirada rasgada y americanas cubiertas de minúsculas ideas,
zombies drogados,
extranjeros perdidos,
Ladrones de ojos hundidos,
psicópatas con autoridad para ser gladiadores,
poetas lunáticos,
dinosaurios que sobrevivieron al naufragio de las certezas,
Bailarines de street-dance,
una estrella del rock, de entonación cansada y camisa de cuadros...
y fanáticos seguidores de Dios gritando,
como hinchas enfervorecidos saliendo del estadio de Yokohama.

Con síntomas de agotamiento,
te descubrí en aquellas escaleras mecánicas.
Giraste la cabeza
y coronando los andamios de tu cuerpo,
en la cima, tus ojos helados
como un cuadro de Chagall visto por Hiroshige,
como el invierno cayendo en paracaídas,
como la anunciación del alba
descendiendo sobre las hojas secas,
que gritan AMOR al ser pisadas.

Estremecido, como si viese el monte Fuji por primera vez.
Sentí la necesidad de ser el teniente Ibusuki
empujado por el viento divino
soplando mi aeroplano hacia ti.
Quise ser como Kane,
y que tus ojos fuesen Rosebud,
pero sólo era Yuichi, y estaba en Tokyo.

Días mas tarde en aquel restaurante,
me sentí protegido mientras bebía Sapporo.
Ahora estás a salvo-Me dijiste
mientras yo devoraba shumai y tanuki-udon
con la boca atiborrada de besos encarcelados,
entre algas.

Todos los músculos de mi cara al servicio de la sonrisa,
por un instante fui feliz
en aquel olvido pasajero,
como una navidad perpetua.
Pero el miedo me acechaba,
dibujando una trayectoria explosiva
dirigida hacia mi, su destinatario final,
envolviéndome.
Y salí huyendo,
sin pagar la cuenta,
hacia el enemigo
sabiendo que pronto dejaría de vivir.



miércoles, 26 de octubre de 2011

ROSALIE BLUM-Camille Jourdy


Divertida, optimista, genuina, son las principales causas por las que me ha gustado este relato gráfico que empecé con mucho escepticismo, aunque pronto captó mi interés, por lo que cada día me sentí obligado a buscar tiempo para tomar prestado una nueva entrega de la historia, hasta completar los tres volúmenes que la componen.

Rosalie Blum es una novela gráfica con dibujos de trazo sencillo y tonos pastel, que recuerdan a Teo. Quizá por eso me sentí víctima de algunas miradas, que con extrañeza sentían la curiosidad de adivinar porqué un tipo aparentemente adulto leía un cuento infantil.

Rosalie Blum cuenta la historia de un peluquero que lleva una vida anodina en un pequeño pueblo francés, hasta que un día en una tienda a lo que no suele acudir, se cruza con alguien que le resulta extrañamente familiar, Rosalie Blum, desde eso momento su intriga le lleva a adentrarse en una espiral de misteriosas persecuciones.

Soledades, búsquedas, contrapersecuciones ingeniosas parecidas a un juego de espejos, giros inesperados, obsesiones asoladoras que rozan la locura, los tópicos vitales, historias de amor y desamor, detalles cotidianos contados con una sencillez auténtica y deliciosa.

La autora, se ha inspirado en cada uno de los detalles de su entorno de forma fotográfica, en sus amigos, en su familia , para dibujar con gran profundidad los escenarios y personajes de este relato gráfico: tímidos, exuberantes, planos, me parecen muy interesante el juego de peso de los personajes secundarios.

La historia está perfectamente solucionada y acabada. Ha causado sensación en el festival del cómic de Angouleme del 2010. A mi, personalmente me ha gustado mucho. Recomendable.

sábado, 15 de octubre de 2011

ALEKSANDAR HEMON-Amor y Obstáculos.


Después de leer "Amor y Obstáculos", encuentro muchas respuestas a la pregunta de porqué me gusta tanto la literatura de Hemon. El conjunto de sus relatos son una especie de mensaje cifrado que me atrae poderosamente. Por un lado me desconcierta: ademas de burlar toda expectativa de lo convencional, sus historias, me resultan extrañamente poéticas. Tiene una imaginación desbordante para arrancar de la espinosa realidad cotidiana, historias extraordinariamente líricas con las que es muy fácil conectar.

Todos los personajes de amor y obstáculos tienen algo en común: Ser inadaptados ,cuyas imágenes mundanas, seriamente socavadas, encuentran en la literatura o en la pasión de las vidas imaginarias, su salvación.

"Sería la primera vez que viajaría sólo, mi primera oportunidad de vivir experiencias de las que surgirían muchos poemas. Pues yo era un poeta en ciernes; había llenado cuadernos enteros con los versos de los anhelos y el tremendo aburrimiento(siempre la otra cara del anhelo) de un adolescente. Me equipé para la expedición: un cuaderno sin estrenar; lápices extra; un libro de Rimbaud, mi biblia (mientras yo descendía por ríos impasibles/ sentí que ya no me guiaban los remolcadores...); paquetes de Marlboro( en lugar de los habituales y asquerosos Drinas); y una píldora anticonceptiva que había conseguido a cambio de Physical Graffiti, un elepé doble de los Led Zeppelin que ya no me gustaban, pues me había pasado a los Sex Pistols."

La literatura de Hemon está envuelta de una aureola de autoficción inquietante, puesto que sus relatos son un pretexto para hablarnos de su vida como inmigrante atrapado en Chicago; como refugiado tras estallar la guerra de los balcanes, que imposibilita su regreso a Sarajevo. Su etapa por el país de los sueños no es del todo fácil, trabaja de cualquier cosa: vendiendo revista, de aparcacoches, de cocinero en un restaurante de comida rápida. Desdibujar el sufrimiento como una condición de la existencia es uno de los elementos que en su literatura se barajan.

"Le invité a beber en un bar lleno de banderines de los Badgers y de chavales uniformados con el jersey de la facultad, donde unos televisores a todo volumen mostraban a unos idiotas con casco que embestían de cabeza. En cierto momento se quedó callado, yo era el único que hablaba y toda la tristeza reprimida de vivir en Estados Unidos brotó de mi. ¡Oh, cuantas veces le había deseado la muerte a todo un equipo universitario de fútbol americano! Era imposible verte con un amigo sin concertar una puta cita con semanas de antelación, y no había cafés con terraza en los que pudieras sentarte y ver pasar gente. Estaba harto de que me preguntasen de dónde era, odiaba a Bush y a sus fanáticos seguidores de Jesús. Con cada partícula de mi cuerpo odiaba las palabras "Hidratos de Carbono" y el exterminio sistemático de la alegría en la vida estadounidense."


Hemon utiliza todos los medios para manipular el lenguaje y conquistar al lector. Sus textos, extrañamente poéticos, son una explosión contenida de humor negro algo canallesco, escatológico a veces, irónico, políticamente incorrecto, rabioso y violento, melancólico y exquisito. Todo un despliegue de libertad lírica que resulta por inusual, atractivo.

Sus relatos a veces recuerdan a películas francesas de realismo un tanto mágico, tipo Leolo o Delicatessen, con personajes grotescos dibujados de forma esperpéntica- El embajador era recio, remilgado, con una boca pequeña que parecía un culo apretado-. Con ellos se ve desplegada toda su capacidad narrativa: desde un premio pullitzer vestido con camisa estampada y calcetines blancos para una gala de la embajada Americana en Sarajevo al que le dice-Me encantan sus calcetines blancos Macalister, cuando se los saque no los tire. Regálemelos. Los guardaré como reliquia, los oleré cada vez que escriba para que me den suerte-a un compañero de piso en Chicago, de origen Ucraniano, el cual tiene una colección en su armario de sopas clasificadas por orden alfabético.

Sus personajes, se ven envueltos en situaciones cotidianas convertidas en ficción, algunas simpáticas y amables, otras dramáticas y desgarradoras dentro de un mundo cambiante y extraño. Desde travesuras un tanto sádicas de la infancia, en la que declaran la guerra a unos obreros que empiezan a construir en su centro de reunión, hasta sus anécdotas con los habitantes de un barrio obrero residencial de Chicago, al que se desplaza como vendedor de revistas a puerta fría, pasando por la guerra de los Balcanes o su primer viaje en tren solo a una ciudad desconocida de Eslovenia.

Hemon escribe en un idioma que nos es el suyo, eso es algo que le confiere más mérito todavía. Es fácil adivinar que he disfrutado mucho con su último libro que recomiendo, por supuesto.

sábado, 8 de octubre de 2011

Raíces Nómadas-Pius Alibek.




"Pertenezco a una tribu que, desde siempre, vive como nómada en un desierto del tamaño del mundo. Lo único que nos vincula por encima de los barcos, por encima de la Babel de las lenguas, es el murmullo de un apellido"

Amin Maalouf-Orígenes.

Hace tiempo intenté leer Orígenes, la biografía de Maalouf o mas bien su investigación por encontrar sus raíces familiares. Después de un comienzo así, era imposible que el libro no me gustase. Pronto, se me hizo demasiado denso y desde hace tiempo sigue en la estantería. Por el camino, a caballo entre Maalouf y las historias de Kapuscinski, con un estilo mas cercano a la frontera del relato que a la frontera del ensayo, me topé con Pius Alibek. Su biografía se detalla en su libro -Raíces nómadas, y he de decir que es uno de los libros mas interesantes y completos que he leído este año.

En raíces nómadas descubrimos el pasado de Irak, a través de un viaje a un mundo perdido ya, el Irak previo a la guerra frente a Irán, un país próspero, culto y multiétnico. Allí nació Alibek, en el seno minoritario de una familia cristiana cuya lengua es el arameo.

Sus anécdotas colegiales en Basora después de que su familia fuese obligada a trasladarse desde Ankawa, sus evocadores y familiares recuerdos infantiles, su etapa adolescente en un seminario en Bagdag, la perdida de la vocación religiosa, la rebeldía, el despotismo gubernamental, la etapa en la universidad y el despertar sexual, su apertura al mundo en Londres, la lucha contra el desierto en el servicio militar y la guerra entre Irán e Irak son las coordenadas que determinan el destino de este autor, filólogo y cocinero con residencia en Barcelona, donde regenta el restaurante Mesopotamia.

Una historia cautivadora, cargada de costumbres que ayudan a entender la cultura oriental, un relato lleno de aventuras y anécdotas que consiguen despertar el interés del lector, un personaje admirable por su humanidad, por su insaciable curiosidad, por su valentía para atar perfectamente la cuerda del destino al globo de sus sueños. Buscando con rebeldía la libertad, tuvo los ojos bien abiertos y no existía velo que cegase su mirada.

Especias, carne de cordero, vasos de Arak, sueños en azoteas frescas arropados por sábanas de estrellas en calurosas noches, dentro de un país próspero, emergente, abierto al desarrollo, culto, independiente, libre de los Otomanos y de Europa, con un gobierno convertido en una mezcla del nacionalismo, comunismo y fundamentalismo como precedente del Baas y Sadam Husseim.

El libro, de todos modos, no es demasiado político, y nuestro protagonista que puede definirse como apartidista que no apolítico, siempre supo navegar perfectamente por las aguas pantanosas que pudieran ser contrarias a un determinado régimen, como cuando navegaba con su padre en armonía por las marismas de Al-Ahuar. Contrario al conformismo, con los pies en la tierra desarrolla un sentido de la justicia extraordinario y su vida es un viaje lleno de aspiraciones.

Por el camino hay anécdotas entrañables, hechos trágicos, historias de amor, sentimientos, momentos simpáticos contados con sentido del humor, adversidades, aventuras por el desierto, un espacio al debate entre las pequeñas diferencias en la dicotomía oriente y occidente, en definitiva un relato fascinante narrado con sabiduría y sencillez, muy ameno, de muy fácil digestión. Absolutamente imprescindible.
"En Irak, como en la mayoría de los países árabes, siempre ha habido una especie de miedo a relacionarse con extranjeros, sobre todo occidentales. La proximidad de un extranjero produce una sensación desconcertante. Una curiosidad natural por conocer y darse a conocer reprimida por miedos y desconfianzas atávicas, que los gobiernos modernos han seguido alimentando hasta convertirlas en un tumor maligno. Hoy día, el extranjero es un espía o un agente en potencia y comunicarse con el te convierte en sospechoso, traidor a la patria o parte de un complot imperialista. El fenómeno es frontalmente opuesto al carácter hospitalario de los pueblos de la región y a la necesidad ancestral de mostrar dicha hospitalidad. Las razones históricas de esta prevención radican en las continuas invasiones del territorio por fuerzas extranjeras, atraídas por las riquezas y el valor estratégico de la zona".