Caribou Island es una pequeña isla de Alaska con fugaces veranos, fríos otoños e inviernos glaciares. Un entorno, ideal para escapar de los fantasmas interiores. Un paisaje extremo de abetos y abedules, entre mosquitos y algún que otro oso, un escenario diferente al que conocemos, e ideal para crear una atmósfera de relaciones humanas, enraizadas con la naturaleza salvaje.
Los libros de David Vann son como una bomba de mano. Según vas avanzando en la historia, la mecha se va consumiendo, y de antemano tienes la certeza de que estallará en tus manos. Desde el comienzo del libro existe un olor trágico, un desenlace fatal, que más tarde se destapa, hasta producirte cierta sensación de asfixia interior.
Si en Sukwan Island, uno de los mejores libros del 2011, un hijo sigue a su padre en la aventura de sobrevivir en una isla solitaria, inhóspita y extrema. En Caribou Island, el drama surge de una matrimonio agotado, de avanzada edad, que busca construir una cabaña en esta isla. El tardío avance de la construcción adentrándose en tiempo frío no perdonará, y ambos se envolverán en una tensión agónica por equilibrar sus deseos, sus temores y sobre todo, sus fracasos.
Caribou Islan sigue la línea amarga, agobiante e impactante de Sukwan, aunque quizá perdiendo un poca esa carga de tensión de algunos pasajes que nos hacían recordar el porqué nos gustan autores como Coetzee, o Carmac McCarthy.
El resultado final es bastante brutal, desgarrador. Recomiendo a este autor.
Anotado para cuando termine "Historia de dos ciudades"!!!
ResponderEliminarTe recomiendo Sukwan Island. Es más auténtico y está escrito con más intesidad!.
ResponderEliminarah, vale, se ha adelantado "matar a un ruiseñor" como próxima lectura a historia de dos ciudades, pero después si no he conseguido el quinto de canción de hielo y fuego, trataré de agenciarme Sukwan Island
ResponderEliminarMe apunto "matar a un ruiseñor"!!
ResponderEliminar