martes, 4 de enero de 2011

Desde hoy te acompañaré a casa-Kjell Askildsen


Inauguro el 2011 con"Desde hoy te acompañaré a casa". Llegó a mis manos a través de una iniciativa de la biblioteca municipal que, aprovechando el tirón de los escritores escandinavos y el oportunismo de la navidad, ha realizado una selección de libros de literatura nórdica, digestiva y ligera.


Askildsen es uno de los actuales maestro del relato breve. Aclamado por la crítica,su literatura es increíblemente precisa, escueta, sencilla. Sin necesidad de adornos saca mucha rentabilidad al "no decir", a la economía de las palabras, pero en todo caso su obra es intensa e incisiva, sus textos son un punzón, un bisturí que escarba hasta encontrar nuestros fantasmas interiores.
Las historias encierran acontecimientos aparentemente insignificantes,cotidianos, si algo tienen en común los relatos es la extrañeza ante las circuntacias, que uno espera ,cargados de sentido. Cada historia encierra un secreto oculto que el lector desentraña, interpreta, reflexiona. El libro es un magistral estudio de la condición humana, un mapa en busca de los tesoros de lo imprevisible, porque las personas deberían venir con un libro de instrucciones bajo el brazo.

"Cuando era joven pensaba que la muerte parecía cada vez menos aterradora conforme te ibas haciendo mayor, simplemente porque ya estaba cansado y porque tenía que ser así para poder soportarlo, pero no es verdad, es mentira"

La primera relación sexual, el reencuentro con un pasado doloroso, la sensación del miedo, los recuerdos,l a fortaleza interior, la inteligencia emocional ante el peligro, la existencia de Dios, la inocencia de la juventud. Los personajes son espejos del alma. Están ciegos y perdidos, ven la vida a través de unos prismáticos en los que la visión está obstaculizada y, practicamente, no escuchan, o escuchan de forma distorsionada, por eso, no pueden controlar de forma absolutas las situaciones provocando acaloramiento, intranquilidad e incluso ira consecuencia de la incertidumbre de las cosas.

Emociones, cobardía, incendios interiores, tormentas del alma,t raumas dramáticos, falsos prejuicios, búsquedas evolutivas para encontrar el mapa de quienes somos, sentimientos sin transición son elementos que nos condicionan día a día, gota a gota.

Palabras nunca dichas, monólogos en voz alta que nos resultan familiares, sentimientos de culpa que nos angustian, me parecer un libro verdaderamente inquietante.

"Al principio Karl estaba muy silencioso, luego le oímos llorar y nos hicimos tan pequeños como pudimos arriba en el tejado de chapa ondulada. No era un llanto vehemente, y sino fuera porque su casa se había quemado hacía poco, tal vez habríamos pensado que estaba canturreando, pero no lo hacía porque, cuando un poco después se levantó, lo vimos secarse los ojos."

Pienso que las personas somos un catálogo heterogéneo de modelos de conducta, de sistema de reflexión, de acción y reacción, de lenguajes distintos de difícil lectura e interpretación, ello dificulta aún mas el entendimiento, la unión, la comprensión. Pensamos de antemano que la batalla está perdida, tal vez por ello seamos tan influenciables por todo aquello que nos dictan y no requiere de un gran esfuerzo, nuestro motor es el beneficio y lo desconocido nuestro temor. Todo lo que provoca el desentendimiento está en este libro.

"La entrada,la escalera de arriba,tiemblo,el cuarto,al menos logré decírselo,no hay que sentir lástima por él, ya no tendrá que verme más, la maleta, al menos no ganó, que significa ganó, al fin y al cabo todo el mundo pierde, las victorias provisionales no son mas que derrotas aplazadas, pero no he venido para vencer, sino para no ser vencido por una vez,ha sido una visita corta,ojalá el no....bajo la escalera, pero no puedo marcharme sin despedirme,sí puedo,¿es porque tengo miedo?. No va a ser una huida sin mas,sino una despedida,¿debo llamar a la puerta o entrar sin mas?Llamo,ya no estoy en mi casa,no contesta,entonces me voy,tiene que haberme oído,si no ha salido al jardín.
Abrió la puerta,su padre(el mismo que de niño le pegaba) estaba sentado en el sillón de respaldo alto,mirándole."

Me parece un gran libro, necesario, de intensa reflexión, de debate, ideal para regalar por estas fechas, digno de dedicarle una tarde de domingo con la melancolía tras el cristal.

Lo recomiendo encarecidamente.

3 comentarios:

  1. Como siempre nos haces desear tener más tiempo, mucho más tiempo, para degustar todas las lecturas con las que nos pones lo dientes largos.
    ¡Gracias!

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  2. Está en mi lista de pendientes.
    Te recomiendo seguir con "Los perros de Tesalónica".
    bss

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  3. Me ha dejado un gran recuerdo este libro y por supuesto continuaré leyendo de este autor.

    Me ha llamado mucho la atención,teniendo en cuenta la sencillez con la que escribe,la profundidad e intensidad que alcanzan sus relatos.El próximo sin duda "los perros de tesalónica".

    Muchas gracias pelirrosa,un besote.

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